Llevar energía eléctrica a regiones apartadas es todo un reto, afortunadamente el Programa de Servicios Integrales de Energía dirigido por CFE en conjunto con SENER ha logrado concluir la construcción de 36 plantas solares en 8 estados del país con recursos aportados por el Banco Mundial.
El objetivo de este programa de alto impacto social es Abastecer de energía eléctrica a comunidades vulnerables y alejadas de la red eléctrica.
El pasado 30 de octubre del 2015 el programa se concluyó satisfactoriamente.
Una de las comunidades beneficiadas es Toyana en Durango, (con 53 habitantes) es una comunidad indígena de la etnia Tepehuanes, hablantes de la lengua “o’dam”
La planta solar que se construyó en esta localidad tiene una capacidad instalada de 24kWp, que suministra energía a un total de 13 viviendas. Gracias al suministro de energía eléctrica los habitantes de esta comunidad podrán iluminar sus casas de noche así como adquirir alimentos perecederos que complementen su alimentación básica. Cabe mencionar que la comunidad está muy contenta y tienen interés por conocer que otros usos pueden darle a la energía.
Canoitas es otra localidad que ahora cuenta con energía eléctrica, también ubicada en Durango esta comunidad cuenta con 100 habitantes entre los cuales predomina la etnia indígena denominada Tepehuanes. La planta solar que se construyó en la localidad consta de una capacidad instalada de 70kWp, que beneficia directamente a 44 hogares. Uno de los impactos del suministro de energía es que los habitantes tendrán la oportunidad de mantenerse comunicados.
Los habitantes de Canoitas prevén que gracias a la planta habrá un crecimiento en su comunidad y esperan tener acceso a nuevos servicios tales como el Internet, telesecundarias, mayor cantidad de medicamentos en el centro de salud, y aumento en la cantidad y variedad de abarrotes disponibles.
En Nayarit en el municipio de Nayar, está el Ejido de Potrero de Palmita que es otra de las localidades beneficiadas, esta localidad cuenta con 532 habitantes de los cuales la mayoría pertenecen a la cultura indígena “Wixárika” mejor conocida como “Huichol”.
La planta eléctrica solar que se construyó en la localidad consta de una capacidad instalada de 138 kWp, que beneficia a todas las viviendas de la comunidad y a la escuela local. Gracias al suministro de energía eléctrica los habitantes podrán comprar refrigeradores que permite a la comunidad preservar y diversificar los alimentos que consumen, así como la posibilidad de realizar actividades nocturnas gracias a la iluminación en los hogares.
Es importante señalar que la comunidad participó en la construcción de la planta, algunos recibieron paga pero la mayoría lo hizo voluntariamente. Los habitantes están felices y manifestaron su agradecimiento.
A continuación un breve resumen de las plantas solares restantes: