Mangalore Refinery and Petrochemicals Limited (MRPL), una importante empresa de refinación india con sede en Mangalore, tiene previsto una instalación de etanol de segunda generación (2G) en el Estado de Karnataka (India).
MRPL ha adjudicado a LanzaTech el contrato para iniciar la ingeniería básica de una instalación de procesamiento integrado para convertir los residuos agrícolas disponibles localmente en aproximadamente 16.000 toneladas métricas (5,3 millones de galones) al año de etanol apto para combustible. Para convertir los residuos de biomasa sólida en gases, LanzaTech desplegará la tecnología de gasificación comercialmente probada de Ankur Scientific, una compañía de residuos a energía que se especializa en la producción distribuida, con sede en Vadodara, India. El gas rico en carbono resultante se convertirá luego en etanol utilizando la plataforma de fermentación de gas de LanzaTech, de eficacia probada comercialmente. La tecnología integrada tendrá la flexibilidad de procesar una amplia gama de materias primas de biomasa, lo que permitirá su rápida reproducción en otros lugares.
Un subproducto del proyecto será un biocarbón rico en nutrientes. Éste se utilizará como una fuente sostenible y de bajo carbono de fertilizante para la comunidad local.
El Gobierno de la India está fomentando la producción de etanol celulósico a partir de desechos y residuos agrícolas que, de otro modo, se quemarían en los campos y crearían una contaminación perjudicial. La conversión al etanol no sólo crea una nueva fuente de ingresos para los agricultores locales, sino que también está en consonancia con la hoja de ruta sobre biocombustibles del Gobierno para aumentar la producción de etanol 2G, no alimentario o basado en piensos en todo el país a fin de cumplir su mandato de mezclar un 20% de etanol para 2030.
“En estos tiempos de grandes cambios y desafíos económicos, este proyecto definirá, con suerte, cómo podría ser el futuro. Este es un proyecto que no sólo producirá combustible limpio, sino que devolverá la mayor parte del dinero a la economía local y creará los tan necesitados empleos rurales”, dijo Ankur Jain, Director General de Ankur Scientific. “Los residuos agrícolas locales de las zonas rurales, con empleos en las zonas rurales generando un biocombustible avanzado – ¿Puede algo ser mejor? Esperamos poner en marcha con éxito este primero de muchos proyectos”.
“Este proyecto con MRPL demostrará que un modelo distribuido local es ideal para la producción de combustibles y productos químicos a través de la biotecnología”, dijo Jennifer Holmgren, CEO de LanzaTech. “El compromiso de MRPL con el desarrollo sostenible, los puestos de trabajo locales y la reducción de las emisiones de carbono se ejemplifica con este proyecto y estamos encantados de trabajar con ellos para mostrar la viabilidad de la producción de combustibles distribuidos”. Si COVID y el cambio climático nos van a enseñar algo, es que debemos construir sistemas resistentes, esto significa que la producción distribuida debe convertirse en una parte importante del futuro de la producción de combustible”.